Introducción: los adolescentes son un
grupo vulnerable por su baja
percepción de riesgo y sus conductas sexuales riesgo. Objetivos: modificar el nivel de conocimiento sobre conductas sexuales riesgosas y relaciones sexuales seguras.Método: se realizó un estudio de intervención educativa comunitaria,cuasiexperimental, con un diseño antes y después, en 50 adolescentes entre 14 a 19 años del Consultorio # 24, perteneciente al Policlínico "Pedro del Toro",
de Holguín, desde enero 2019 a enero 2021. Se utilizaron métodos estadísticos para variables cualitativas nominales, medidas de dispersión y tendencia
central y test McNemar para contraste de hipótesis.Resultados: el inicio de las relaciones sexuales revelo una actividad sexual precoz del 37% superior a estudios previos. Antes de la intervención, las dificultades en las temáticas correspondieron a
las conductas sexuales de riesgo con 43 casos (86%) y conductas sexuales protectoras con 35 casos(70%), posteriormente se alcanzaronresultados favorables en 94% y 100%
respectivamente para p: 0,039 y p: 0,002 obtenidos de la prueba de hipótesis McNemar. Las conductas sexuales responsables más aceptadas fueron practicar sexo protegido con preservativo en adolescentes activos sexualmente y prácticas de sexo seguro en aquellos sin inicio de relaciones sexuales.Conclusiones: las conductas sexuales protectoras deben ser reforza Conclusiones: las conductas sexuales protectoras deben ser reforzadas
mediante técnicas participativas grupales para evitar frustraciones en su salud reproductiva y sexual futura.
Palabras claves: Adolescencia, Conducta sexual, Infecciones de transmisión sexual, Educación sexual, Educación en salud, Estudio cuasiexperimental.